Nací en el corazón de una familia de músicos clásicos, mis padres y mi hermano tocaban los estudios de Bach con sus instrumentos de cuerda todo el día. Crecí con la copla española sonando en el coche cada verano. Yo cantaba el “A tu vera” y “Te lo juro yo” sin cansarme, imaginándome encima de un escenario, dándolo todo. Luego maduré con el jazz y su lenguaje liberador, aprendiendo que la palabra improvisación era una puerta hacia una infinidad de posibilidades que me motivaba y seducía.
Bailé muchísimo, música de influencia latinoamericana con tanto sabor que se me impregnó en el alma, fraguando un deseo de echar la mirada al otro lado del atlántico y cantar a su folclore unos años más tarde. Después de mis dos primeros discos, "Primera Mirada" y "Una Frase Imaginada",, mi último trabajo "Los Dioses No Rompen Corazones", es un EP conceptual inspirado en la copla tradicional que narra la historia de superación de una decepción amorosa. Ya puedes escucharlo en todas las plataformas!