El objetivo de la meditación es transformar la mente. Todos tenemos una mente y todos podemos trabajar con ella. Quien toca un instrumento musical tiene que entrenar y entrenar hasta que desarrolle su potencial. Nadie espera tocar el piano sin entrenamiento. ¿Por qué sería diferente con cualidades potenciales de la mente como la relajación, la atención, la concentración y la compasión? Si consideramos que el beneficio de la meditación es proporcionarnos una nueva experiencia mundial en cada momento de nuestras vidas, entonces no parece exagerado pasar al menos veinte minutos al día conociendo mejor nuestra mente y entrenándola.
La ciencia hoy en día ve los beneficios de la meditación, y muchos programas ofrecen las prácticas de una manera bien estructurada y secular, con efectos probados tales como la reducción del estrés y la ansiedad, la activación de áreas del cerebro relacionadas con el bienestar, y el aumento de la conducta altruista.
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