SalĂ de mi casa a los 18 años y empecĂ© a caminar. Fui felĂz en las ciudades por las que pasa un rĂo. Pero en todos los lugares que he vivido encontrĂ© personas dispuestas contar sus historias. Muchas de ellas relacionadas con el arte, con el acto creativo en sus mĂșltiples formatos. Historias de Europa, Ăfrica y AmĂ©rica, dignas de ser contadas y compartidas.